lunes, 14 de enero de 2013

Josep Ribas 27 de junio de 1938



 


27.06.38

Muy amiga Francesca,

Ayer por la noche recibí tu carta del 20 que ya hacía unos días que esperaba, me extraña que tardara tres semanas como dices tú a escribirte seguramente se debía perder alguna.
 
Veo que ya estás acomodada en el Instituto y que te encuentras a tu gusto, eso me recuerda a cuando yo estaba estudiando en Francia, con el grupo de compañeros inseparables que todo lo arreglábamos o destrozábamos y que hasta ahora han sido los días más felices de mi vida. Veo también que la manutención no es demasiado admirable, pero paciencia. Nosotros también, si no fuese porque ya estamos acostumbrados también nos quejaríamos pero ya está bien, es la guerra, creo que vosotros debéis decir lo mismo pues es lo de cada día.
 
Los tres enmascarados continúan con sus entuertos, ya debes saber de quién se trata, de Izquierdo, Lladó y de un servidor, aquí ya encontramos fruta de todo tipo, ensaladas de tanto en tanto, todo esto acostumbra a salirnos baratito, aunque la fruta nos la tenemos que comer verde, de otra manera a su tiempo no habrá ni rastro, además preferimos dormir al raso y en el suelo, no en la paja pues resulta que si durmiéramos en ella a la mañana siguiente nos encontraríamos en el otro lado de la sala transportados por un montón de tanques de razas diversas, si no fuera porque cada día se hace un repaso, y hemos conseguido tenerlos a raya, de otra manera aquí corren y aunque no quieras se imponen.
 
Ves, el sello escogido pensaba que era otro pero ahora ya veo que no hubiese resultado pues había un exceso de términos, era uno que además tenía el sello de la ciudad y una lanzador, estoy contento de ver el primer dibujo reproducido, eso es todo lo que yo deseaba al presentar los originales. Me gustaría poder decir lo mismo de la tarjeta que en mi última ya te hablaba de ella, te agradezco los ánimos inmerecidos aunque me gustaría mucho poderte decir alguna cosa bien pronto.
 
No sé qué mal aire ha pasado por Sabadell, todos nosotros recibimos noticias diciendo que si por allí decían quien sabe las desgracias que nos habían sucedido, como puedes ver al menos los que estamos aquí no nos ha pasado nada. Ahora te diré una mala noticia de un compañero del Instituto y del grupo de la leva del 40 se trata de Pascual, tal vez ya estarás enterada pero tengo que decirte que está muerto, otro compañero que hacía unos días que no sabíamos nada nos ha escrito dándonos la mala noticia que te acabo de decir.
 
Izquierdo dice que ya ha escrito tres cartas y se extraña de que vosotros los del Instituto no las hayáis recibido, seguramente uno de estos días las recibiréis.
 
El otro día escribimos a la F.A.E.E.P. Espero que ya la habréis recibido y que nos contestaréis, espero también que tú continuarás manteniendo junto con las demás compañeras el fuego de la federación y la entrada en el instituto no nos privará de un elemento tan indispensable como eres tú, ya que sin ti aquello perdería un 100 %.
 
En el sitio donde estamos hay mucha agua y por los regueros buscamos cangrejos de río, ya hemos comido y resultan muy buenos, lo que es más divertido es la hora de cazarlos y también cuando es el momento de tapar los regueros. Los encontramos más buenos que los langostinos.
 
Hoy en un pueblecito a pocos quilómetros de aquí donde nos encontramos hacen una fiesta como la que días atrás hicieron con nosotros y que ya te conté, a nosotros nos han dado permiso para poder ir, ahora cuando acabe esta yo y Izquierdo nos afeitamos y vamos para allá.
A ver si en tu siguiente carta me pones la letra de “Liruka-ha” tenemos muchas ganas de cantarla.
Ahora para terminar te diré que si fueras mi hermana podría poner querida Francesca me despido de ti, etc. etc. pero como no lo eres ya sé que te enfadarías y por tanto por ahora me tengo que contentar con poner:

Se despide de ti.

El compañero J. Ribas
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario